LA FUERZA DE LAS JUVENTUDES EN LA ELECCIÓN DEL 01 DE JUNIO: HACIA UN PODER JUDICIAL MÁS JUSTO Y REPRESENTATIVO

El próximo 01 de junio, millones de mexicanos acudirán a las urnas en una de las elecciones más importantes de los últimos tiempos. Si bien el foco mediático ha estado centrado en la Presidencia de la República, el Congreso y otros cargos de elección popular, existe una dimensión fundamental que no debe pasar desapercibida: el rumbo del Poder Judicial. En este contexto, la participación de las juventudes se vuelve crucial para garantizar un sistema de justicia más democrático, transparente y cercano a la ciudadanía.

Durante décadas, el Poder Judicial ha sido percibido como una institución lejana, técnica y reservada para unos cuantos. Sin embargo, las recientes discusiones sobre su reforma y democratización lo han colocado en el centro del debate público. La posibilidad de que las y los jueces, magistrados y ministros puedan ser electos por voto popular representa un cambio paradigmático en la forma en que concebimos la justicia en México. Y es precisamente aquí donde las juventudes tienen un papel determinante.

Las y los jóvenes representan más del 30% del padrón electoral, lo que significa que sus decisiones pueden definir el resultado de cualquier elección. Según datos del Instituto Nacional Electoral (INE), en 2024, las personas de entre 18 y 29 años constituían aproximadamente el 30% de la lista nominal de electores, lo que equivale a cerca de 26.2 millones de personas. Pero más allá de los números, las juventudes también traen consigo una visión crítica, fresca y comprometida con los derechos humanos, la equidad de género, la diversidad y la lucha contra la corrupción. Son voces que exigen que la justicia no solo sea imparcial, sino también sensible a las realidades sociales del país.

Además, la participación juvenil no se limita al acto de votar. Es también informarse, debatir, cuestionar y exigir rendición de cuentas. Las redes sociales y los espacios de organización juvenil se han convertido en plataformas donde se discuten temas jurídicos, se explican procesos legales y se impulsa la participación cívica. La justicia ya no es un tema exclusivo de abogados y jueces: es un derecho de todas y todos, y las juventudes lo saben.

En tiempos de polarización y desconfianza institucional, el involucramiento juvenil en las elecciones representa una esperanza. Una generación que apuesta por la legalidad, la transparencia y la transformación social no puede ser ignorada. Su participación activa puede ser el motor que impulse un nuevo rostro para el Poder Judicial: uno más humano, más justo y más cercano a la gente.

El 01 de junio es mucho más que una jornada electoral. Es una oportunidad histórica para construir un país donde la justicia no tenga privilegios ni excepciones. Es el momento para que las juventudes alcen la voz, se informen y participen. Porque cuando las y los jóvenes votan, la democracia se fortalece… y la justicia también.