“DESPUÉS DE OCHO HORAS DE ANDAR LABORANDO, DESESPERANZA SE SIENTE EN EL HOGAR”. LA REDUCCIÓN DE LA JORNADA LABORAL EN MÉXICO
- Lorena Cruz Garduño
- 10 jun
- 3 Min. de lectura

Estimado jornalero: ¿Te has puesto a pensar qué tiene que ver el Pollo Feliz con la reducción de horas? ¿O por qué Macario se comió un guajolote él solo? La respuesta está en nuestras canas y en el estilo de vida que hemos creado a partir de relaciones de poder entre el patrón y el obrero. Para seguir con la analogía anterior, un paquete básico del Pollo Feliz equivale a ocho horas de trabajo en un día, es decir, que ya necesitamos replantear una nueva ley laboral que se adapte a la clase proletaria y sus actuales realidades.
El objetivo es abordar algunos puntos como la salud, las malas prácticas de los trabajos (tanto salariales como horarios extensos) y el beneficio que traería consigo la jornada de cuarenta horas en México. Asimismo, llegar a la reflexión de que nuestro entorno juega en contra de nuestra productividad salarial.
TRABAJANDO DURO O DURANDO EN EL TRABAJO. ¿POR QUÉ ES NECESARIA UNA NUEVA REFORMA LABORAL EN PLENO 2025?
Desde el 2018 en adelante, los diputados de Morena habían propuesto la reducción de horas en la jornada laboral; no obstante, se fueron olvidando de sus promesas de campaña. Fue hasta que otros partidos apoyaron la idea como una alternativa de oposición. Dejando a un lado este tema, la importancia de una aminorada hora laboral fue escalando en redes sociales y se convirtió en tema conversación en La Mañanera. Algunos de los puntos que convencen a implementar esta reforma son: mejorar la calidad de vida, mayor productividad, aumento de empleos y una nueva perspectiva de género con base en las necesidades de las mujeres que deseen maternar y trabajar a la vez. Estamos en busca de que el tiempo sea redituable y apropiado. El claro ejemplo es el trauma que nuestros progenitores nos dejaron: ausencia de padres por dobletear e infancias perdidas por llevar el pan a la casa.
BURNOUT: LA NUEVA EPIDEMIA QUE ATACA A LAS MÁQUINAS DEL CHAMBEO
Si bien algo que nos caracteriza a la Generación Z o a los whitexicans es ponerle nombres estéticos a los problemas crónicos que te van deteriorando (para que no suene tan mal). El burnout es un término que señala los síntomas como el agotamiento, el estrés, la ansiedad y el cansancio de un trabajo con “malas vibras”. Esto sucede porque el empleo suele ser pesado o paupérrimo para nosotros. El pasar un exceso de dos horas en una actividad repetitiva y que el ambiente no sea el más saludable (física y mentalmente) ocasiona un desplome que ni el cobro de tus utilidades o vales de despensa va a poder pagar.
LA OBJECIÓN DE LAS EMPRESAS POR LAS 40 HORAS.
Entonces, si no habrá aumento salarial justo por las ocho horas de trabajo, ni mucho menos el respeto por la Ley Federal del Trabajo en cuanto al artículo 25 y el artículo 68, párrafo dos, ¿por qué se oponen a las cuarenta horas y buscan que nos pongamos la camiseta? Porque creen en la antigua cultura empresarial y laboral, me refiero a los desplomes económicos que podrían generar y, a su vez, a perder el sistema meritocrático que han implantado en los trabajadores que anhelan obtener grandes puestos con solo estar a favor del sistema imperial empresarial.
Para finalizar, estos días han llegado los posibles escenarios para la disminución de la jornada laboral. Se supone que sí se va a aplicar, pero poco a poco y hasta el 2030. Mientras tanto, hay que aguantar la explotación laboral, que tu jefe te pague las horas extras con pizzas, el colapso de una ciudad que no está adecuada para los proletariados (hablo de la decadencia del transporte público y el sistema hidráulico que inundan las calles), guerras comerciales, el uso de la IA, elecciones para el poder ejecutivo, etc. Me gustaría que cerremos este trago amargo de realidad con la canción de Panteón de Rococó, “La carencia”. Es el claro ejemplo de exigir una dignificación a nuestro tiempo y a la estancia laboral.
Comentários